BabyCakes NYC-Muffins de manzana y canela

Este verano conocí la pastelería que está haciendo furor en Nueva York. Es una tienda pequeñísima, ubicada en el seno del Lower East Side (la zona que se está gentrificando), donde se preparan todo tipo de pasteles, magdalenas, muffins, galletas, scons y etc. "sanos". Esto quiere decir que son productos veganos (sin ningún producto de origen animal, ni leche ni huevos ni mantequilla) y, en su mayoría, sin azúcar e incluso sin gluten. 

Erin McKenna, la fundadora de Babycakes, utiliza ingredientes alternativos a los tradicionales, para que sean más saludables y tanto personas con alergias o intolerancias al gluten, azúcar, lácteos o trigo, como veganos puedan deleitarse con dulces que parecen tan decadentes y cremosos como los originales, pero sin los kilos de azúcar ni mantequilla. 

BabyCakes utiliza casi exclusivamente el aceite de coco en vez de mantequilla, el sirope de agave como endulzante, y el xantano o goma de xantan como espesante (un polisacarido que se obtiene de la fermentación de los carbohidratos a partir de una bacteria). Y si los pruebas, la verdad es que no te lo crees. Los amantes del dulce (y los americanos sí que lo son) se vuelven locos por los productos Babycakes, y su pequeñísimo local está a reventar todo el día. 

Pero ojo: sin azúcar y sin mantequilla no necesariamente significa sin calorías ni grasas. Sin duda es mejor comerte un cupcake de estos que uno comprado en Starbucks, pero eso tampoco quiere decir que sean adelgazantes o beneficiosos para la salud.  Porque sean más sanos no quiere decir que vale comerse 3 de una sentada y como si uno se comiera una ensalada. 

El aceite de coco es una grasa buena, aunque tuvo mala prensa hace un tiempo, debido a las malas calidades de los aceites de coco industriales (si vas a usarlo, mejojr comprarlo de buena calidad, con certificación ecológica). 

El sirope de agave es un endulzante que viene de una planta originaria de Méjico, pero sigue siendo fructosa y glucosa. En Estados Unidos está muy de moda, y en Nueva York este verano vi que todos los cafés lo tenían como alternativa al azúcar o los endulzantes artificiales. (Además tiene mucha aceptación porque es aún más dulce que el azúcar, a diferencia de otros endulzantes como por ejemplo la melaza de arroz.) Pero su índice glucémico sigue siendo alto. 

Lo que quiero decir con todo esto es que es mejor comerte estos muffins que otros, pero ojo con las cantidades. Hay mucha gente que cree que, como los ingredientes son más sanos que otros, se puede comer el doble o el triple de lo que se comería si estuvieran hechos de azúcar o mantequilla. Pero digamos que eso tampoco conviene mucho.

Dicho esto aquí va una de las recetas del libro, con la que estrené el año: unos muffins de manzana y canela. Una de las cosas que más me gustó de esta receta es que puedes aprovechar y preparar mucha cantidad de manzana caramelizada, que después te sirva para otros postres; queda genial así tal cual, o en mezclas de granola, con yogures, natillas, etc. 

Muffins de manzana y canela de BabyCakes NYC

Ingredientes para las manzanas asadas:

1 kilo manzanas, peladas y cortadas en cubos de 2 cm. 

1 cucharada canela molida

1/2 taza sirope de agave

1/4 taza zumo de limón

Ingredientes para 12 muffins:

2 tazas harina (sin gluten, si es necesario; yo las hice con harina de espelta)

2 cucharitas polvo de hornear

2 cucharitas bicarbonato sódico

1 cucharita goma de xantano

1 cucharita sal

2 cucharadas canela molida

1/4 cucharita nuez moscada molida

1/2 taza aceite de coco (derretirlo antes de medir)

2/3 taza sirope de agave

2/3 taza leche de arroz

2 cucharadas esencia de vainilla líquida

Instrucciones:

Precalentar el horno a 165ºC. Cubrir una placa de horno con papel vegetal. 

En un bol, mezclar las manzanas, canela, sirope de agave y zumo de limón hasta que las manzanas estén completamente cubiertas. Colocar la mezcla sobre la placa de horno. Hornear en el centro del horno durante 35 minutos, rotando la placa 180º después de 20 minutos. Las manzanas estarán tiernas. Dejarlas enfriar. (Las que sobren se pueden guardar en la nevera durante unos días, si es que no te las devoras antes!).

Mantener la temperatura del horno. Preparar un molde de muffins o magdalenas (yo usé los papelitos especiales, pero si son moldes de silicona, como los míos,  ni siquiera hace falta, pero a los niños les gustan mucho estos papelitos decorados). 

En un bol, combinar la harina, levadura en polvo, goma de xantano, sal, canela y nuez moscada. Añadir el aceite, sirope de agave, leche de arroz y vainilla a los ingredientes secos y mezclar hasta que quede uniforme. Añadir 1 taza de las manzanas asadas y mezclar para distribuir. 

Poner 1/3 taza de la mezcla en cada molde preparado. Hornear en el centro del horno durante 22 minutos, rotando la placa a los 15 minutos. Los muffins quedarán dorados, casi marroncitos, y un palillo debería salir limpio. Dejarlos enfriar en los moldes durante 15 minutos antes de quitarlos para que se enfríen del todo.