Cuando todos los ingredientes de una receta son deliciosos, es difícil fallar. Es el caso de este paté, otra receta de Sarah B.
Cuando el calor aprieta, la crema de cereales para desayunar me apetece un poco menos, no cada día como en invierno. Últimamente, las mañanas me piden más té verde (estos días este maravilloso Gyokuro), y lo acompaño a veces con algún pan de espelta de buena calidad, o bien con aguacate, o bien con una mezcla de miso y tahín.
Soy fan de los patés vegetales; todos los que han pasado por mis talleres de cocina lo saben, ya que no dejo de repetir algunos de ellos (el de alubias al romero y el de sardinas son los más populares) para mis alumnos. Las cremas o patés vegetales, además de admitir infinitas variantes, pueden consumirse en todas las comidas: untadas sobre pan o galletas de arroz para desayunar o merendar, o mezcladas con el cereal en las principales comidas.